No culpes a los maestros de tu inoperancia
Ser maestro es una profesión muy demandante y a veces poco reconocida; si al alumno le va bien, dice que es por su capacidad, si le va mal, es muy fácil culpar al maestro y decir que no supo instruir.
Algo de lo que más les llueve como quejas a los profes, es que no enseñan sobre finanzas personales o cosas que sumen a la economía de sus alumnos. Pero de lo que nadie habla, es de la incapacidad de los estudiantes para captar estos conocimientos.
“Ay Cooperando Ando, ¿hoy comiste víbora?” Jajaja, no, discúlpanos si nos lees un tanto venenosos, pero ya estuvo bueno de culpar siempre a los teachers; por eso,hoy te vamos a decir tres maneras en que tus maestros te daban lecciones financieras, pero tú nomás no agarrabas la onda:
- Trabajos en equipo. Recordarás muy bien que había ciertos proyectos en los cuales, además de poner tu conocimiento, debías desembolsar algo de lana. Si eras de los que le pedía al flojo del grupo que pusiera todo el capital con tal de meterlo en el equipo, ahí dejaste ir la oportunidad aprender a elaborar un presupuesto y repartir gastos.
- Venderle tu proyecto. ¿Crees que tu profe tiene la culpa de que decidieras pachangueártela cuando te pedía que hicieras un proyecto y lo pudieras monetizar? Él o ella te estaba preparando para vender una idea o producto, pero por no aplicarte, ahora no puedes conseguir ese empleo o cliente que tanto deseas.
- Inventar un producto. Seguro en la cuarentena o en tiempos de desempleo te la has visto realmente negras. Si hubieras puesto más ímpetu en el ejercicio de inventar un producto novedoso para el mercado, quizá tendrías la capacidad de sacar algo de lana en tiempos difíciles.
Las actividades escolares significan mucho más que solo buscar una calificación o pasar la materia, debes prestar mucha atención en aquellas que tienen una enseñanza muy importante para ti.
Así que ya lo sabes, antes de soltar un temerario “es que mis profes no me enseñaban bien”, mejor analiza si no eras tú quien no quiso aprender.
