El crédito y débito son muy diferentes, y ambos te sirven cañón
Cuando recién comienzas a usar instrumentos financieros formales, es muy normal que pienses que todas las tarjetas funcionan igual, pero no; la tarjeta de débito no es como la tarjeta de crédito.
No debes sentirte mal si para ti solo existen las tarjetas, así, a secas. Pero déjanos decirte que hoy nos comprometemos a que cuando termines de leer esta información, sabrás diferenciar muy bien entre tarjeta de débito y tarjeta de crédito.
Tarjeta de débito.
También conocida como TDD, por los cuates. Se trata de un plástico financiero en el que puedes recibir depósitos (como tu nómina), ahorrar y llevar tu dinero a todas partes de manera segura. Su característica más distintiva es que el dinero que está en ella, es tuyo. Puedes hacer con él lo que te plazca.
Para su contratación, por lo general no necesitas mucho, solo cubrir algunos requisitos en papeleo y en ocasiones, depósitos al ahorro “por apertura”.
Tarjeta de crédito.
O TDC, como también es conocida. Como su nombre lo dice, se trata de crédito en plástico que puedes llevar a todos lados. A diferencia de la TDD, el dinero que hay en la TDC no es tuyo, sí lo puedes gastar pero deberás pagarlo en determinado tiempo.
La contratación de este producto financiero suele ser un poco más compleja, pues como se trata de un préstamo, es muy normal que te pidan comprobantes de ingresos, buena capacidad de pago y un historial crediticio que te respalde.
Si aún no tienes ninguna de las dos, de compas te recomendamos que inicies con la tarjeta de débito, pues créenos que es más fácil aprender a usar el plástico cuando se trata de dinero propio.
Si no sabes por dónde comenzar, te recomendamos dar clic aquí, donde conocerás los beneficios y requisitos de contratación de la TDD de Caja Popular Mexicana, sin duda un servicio financiero que debes tener sí o sí.
